Es difícil detenerse a observar entre el hervidero de
personas sin el riesgo de ser empujado, así que lo mejor es dirigirse hasta un
pasillo largo que sirve de entrada para la cafetería del sitio. Una hostes te
recibe con una cálida sonrisa y de inmediato pregunta:
- – ¿Viene a nuestra cafetería o a la exposición? – Y ella misma se responde: Para la cafetería tenemos lista de espera de 10 personas. Para la exposición el siguiente turno es hasta las 6:30.
Si se elige la exposición habrá que dirigirse a la caja, un estand en color rojo donde otra amable señorita, anotará en un boletito el horario en que te corresponde ingresar al espacio. Faltan algunos minutos para las 6:00 tiempo que puede aprovecharse para tomar las primeras imágenes de la exposición y leer los carteles que explican el origen del personaje. Pero ¿por qué hay una exposición de La Pantera Rosa? Porque está cumpliendo 60 años de su creación.
A la exposición se ingresa cada 30 minutos y se hace en
grupos reducidos debido a que la salas son pequeñas, aunque muy bien
distribuidas y se encuentra en dos niveles de la casona que alguna vez albergara
la morada de Hernán Cortés.
¿Quiénes participan en la exposición? Creativos mexicanos
como el ilustrador gráfico Mareo Flores, responsable de la imagen de las cervezas
Indio, Heineken, Carta Blanca y el vino Concha y Toro; la muralista Sofía Castellanos,
responsable de colaborar con Nike y Chanel; Sofía Carrington quien ha ilustrado
libros infantiles para ediciones B, las revistas InStyle, Bbmundo o los
proyectos en línea de Conaculta; el diseñador de moda Macario Jiménez; el
escritor e historietista Bernardo Fernández BEF, entre muchos otros.
¿Qué vas a encontrar? Ilustraciones, pinturas, máscaras, esculturas,
maquetas y accesorios, todos con la temática de la Pantera Rosa desde el Rosaverso
mexicano.
Aunque la exposición está contemplada para recorrerse en
media hora, no hay problema si uno se demora un poco más. Además, se pueden
tomar todas las fotografías y videos que se desee con la única restricción de
no tocar las piezas, ni traspasar las cadenas.
La entrada cuesta 99 pesos y estará hasta septiembre de
2024.