martes, 12 de julio de 2022

Cristina y su más reciente atrocidad

Abordé el transporte a la misma hora de siempre. Por extraño que parezca, la vagoneta venía vacía. Cuando digo vacía me refiero a que no había un sólo pasajero, cosa rara pues estoy en medio de la denominada hora pico. Gozoso, me acomodé en el asiento posterior. A escasos centímetros había un periódico maltrecho. Lo recogí y traté de acomodar las hojas. Hacía años que no sostenía un ejemplar de La Prensa. Y ahí, entre señores muertos por disparos de arma de fuego, un muerto por el impacto de una tapa de alcantarilla, un muerto lanzado desde un automóvil en movimiento, la preocupación de las autoridades de mi comunidad rural por las anegaciones en temporada de lluvias, la exigencia de un funcionario público por más recursos para la educación indígena y un nuevo fracaso de la selección nacional de fútbol que se queda fuera del mundial y los juegos olímpicos, ahí estaba ella: Cristina Martínez, guitarrista de la banda El Columpio Asesino y a quien idolatré gracias a La última Atrocidad, dúo con Nacho Vegas que pueden encontrar en el álbum Violética.

No sé si se trate de una revelación, de una señal, de las ganas que tengo de escuchar música en vivo. La entrevista, aunque parece más una semblanza, me ofrece una playlist suficiente para esta tarde. No la voy a desaprovechar. por lo pronto, comenzaré con La última atrocidad y seguiré con Babel. Estoy enamorado... una vez más.

No cabe duda que Cristina vino a mí. Retomaré una vieja práctica de mis años mozos y aprovecharé las fotografías del periódico para crearme un par de pósters. Sé que les vale madres, pero se los quería contar.